Misión

La misión del CMEEF es apoyar la mejora continua de la cultura económica y financiera de las personas, para que tomen mejores decisiones en los diferentes roles que desempeñan en la economía. Como consumidores, ahorradores, inversionistas, trabajadores, empresarios, jefes de familia, gobernantes o votantes, todos debemos tener un mínimo de cultura económica y financiera.

Si los recursos son escasos y no alcanzan para todas nuestras necesidades y deseos, debemos aprender a tomar mejores decisiones.

Visión

Aun con las dificultades estructurales de nuestro sistema educativo y productivo, estamos convencidos de que si todos asumimos nuestra responsabilidad de construir capital social, México podrá enfrentar sus retos sin comprometer necesariamente el futuro de las generaciones presentes. La consolidación de una red nacional comprometida con la educación económica no parte de cero. Existen infraestructuras de diversa índole que, unidas para ello, pueden diferenciarnos positivamente en un tiempo relativamente corto.

Con el cumplimiento de nuestra misión, vemos un entorno donde los principales agentes económicos asumen responsablemente sus papeles, a favor de un país que incremente su capital total. Con un balance apropiado de responsabilidad individual y de solidaridad colectiva, vemos un México con consumidores prudentes, ahorradores consistentes, inversionistas socialmente responsables, trabajadores capaces y productivos, gobiernos razonables y votantes juiciosos. Educar para transformar es la vía.

Valores

• Valoramos el criterio científico para entender el mundo que nos rodea, sin que por ello nos neguemos a sopesar el valor ético de todas las decisiones económicas. Queda, sin embargo, en el campo de la libertad y la conciencia de cada individuo, definir lo que es bueno o malo.
• Creemos en la libertad económica con responsabilidad social, con la convicción de que esto se puede traducir en instituciones que promuevan la responsabilidad individual y que atiendan conjunta y subsidiariamente la acumulación de capital social. Admitimos que en un mundo donde la escasez es lo que “abunda”, no hay un sistema económico que agrade a todos. Estamos convencidos de que una economía de mercado (basada en el intercambio libre y voluntario de bienes y servicios), con derechos de propiedad bien definidos, dentro de los límites de la ley natural y las leyes civiles justas, honestas y posibles, se puede impulsar el bienestar individual y social.
• Creemos en una economía donde todos cooperen y desempeñen su papel de manera responsable para crear riqueza. Con recursos escasos y tiempo limitado, nuestra vida en sociedad exige nuestra cooperación para lograr el mayor nivel posible de bienestar. Nos debemos respeto mutuo y reconocimiento para mejorar nuestras capacidades, especializarnos en lo que sabemos hacer mejor e intercambiar nuestros excedentes. Y sin importar lo exitosos que seamos al hacerlo, nuestros límites siempre continuarán restringiéndonos. Será nuestra “elección social” funcionar o no por debajo de esos límites. No es pesimismo reconocer que tenemos limitaciones: solo si entendemos lo que nos restringe, podemos inventar formas y tecnologías para romperlas. El rayo láser no se habría inventado sin entender los límites de la luz.
• Finalmente, consideramos que hay una dimensión ética y social ineludible, que es la de interesarnos por aliviar la pobreza en todas sus formas y de reducir responsablemente la desigualdad.